Respuestas desde el Corazon
“No sólo
necesitas coraje para el momento en el que estás atrancado, sino para la larga
subida -cuesta arriba- para alcanzar la sanidad, la fe y la seguridad”.
Anne Morrow Lindberg
Se necesita
mucho coraje para elegir la esperanza. Puede parecer mucho más fácil,
simplemente ceder ante nuestra adicción. Sus promesas son tan atractivas, la
tentación por la siguiente dosis está justo a la vuelta de la esquina. No
pudimos resistirnos a la trampa del placer sexual, mientras estábamos en las
garras de nuestra adicción. Después de haber actuado, era aun más fácil
entregarnos a la pena y la desesperación. En las consecuencias de la vergüenza,
soledad, miedo y odio a nosotros mismos, fue difícil encontrar un camino de
vuelta a la esperanza.
Pero sí hay una
forma, y es a través de la esperanza que encontramos en nuestro Poder Superior,
y en el apoyo de los demás miembros del grupo. Un adicto no toma la esperanza a
la ligera; hay demasiado en juego, y nuestras esperanzas han sido desechadas
demasiadas veces. Dentro de nosotros, en alguna parte, está el recuerdo de cómo
somos realmente y de qué tan buena puede ser la vida. Dentro de nosotros están
enterrados sentimientos de felicidad y libertad, que esperamos volver a sentir.
Encontramos esperanza cuando asumimos el coraje de ir a buscarlos.
“¿Me estoy
sintiendo desesperanzado hoy? Si es así, replantearé mi actitud clamando a mi
Poder Superior para tomar buenas decisiones. También estaré dispuesto a que
otras personas compartan su esperanza conmigo”.
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